Text by SOFIA GZZ.
Inicia un nuevo año y con ello nuestra lista de propósitos, algunos serán más sencillos como leer un libro y otros representarán un reto, como emprender ese proyecto que nos viene rondando la cabeza desde hace tiempo.
Y sí, lo primero que nos viene a la mente cuando pensamos en el emprendimiento son las responsabilidades y las cosas de adultos... ya sea un proyecto personal o un negocio, el estereotipo de inexperiencia nos atormenta constantemente.
Más allá de la madurez, queremos reforzar la idea de que nunca es muy tarde – ni muy temprano – para emprender, y a la vez presentarte la realidad de una juventud sónica que ha logrado superarse contra todo pronóstico, que ha adquirido experiencia y madurado a la par de sus proyectos.
Valeria Contreras
“He tenido que estar aprendiendo de todo literalmente”
La mente detrás de Mamacita Store nos cuenta que su proyecto ha sido todo un proceso de constante aprendizaje sobre la marcha, entre pruebas y errores encontrar la fuerza para perder el miedo y salir de su zona de confort.
Mezclando todo lo anterior con mucho amor, Vale logró que Mamacita pasara de ser un negocio pequeño deambulante a convertirse en una marca establecida con tan solo 23 años, pues desde la universidad se ha dedicado a darle esa personalidad que todos amamos, asegurando así la conexión con sus clientes.
Valeria es la muestra de que la edad no es un impedimento para darle vida a tus ideas -Lo principal es hacerles caso a tus corazonadas y hacerlo sin miedo.- nos comenta Vale mientras platicamos durante la sesión de Make Up en el patio de Hot House, su proyecto alterno, es que es una caja de sorpresas esta mujer.
Michelle Lartigue
“Al principio no sabía si podría llegar a vivir de la fotografía”
Después de 5 minutos hablando sobre nuestros Signos Zodiacales, la fotógrafa más sweet y patrimonio cultural de Monterrey porque lo digo yo, Michelle Lartigue nos cuenta cómo es que empezó a abrirse paso en el mundo de la fotografía al punto de convertirlo en su principal ingreso.
Destaca que hacer tu negocio redituable es un proceso de autoconocimiento, ser consciente de tu talento y entender el valor de tu trabajo para poder defenderlo – si la gente me está buscando es porque algo estoy aportando – nos dice la Michelle.
A base de constancia Michelle ha aprendido a manejarse dentro de la industria luchando contra su ansiedad y el miedo, a sus 26 años sabe que aún tiene muchas cosas que aprender, pero con mucho esfuerzo ha adquirido las herramientas para continuar encaminando su proyecto a su gusto.
Erick Mendoza
“Yo me decía: wey no hagas esto, nada más estás perdiendo el tiempo, pinche ridículo”
Erick comenzó a interesarse por el Skincare a raíz de una complicación de acné que tuvo hace unos años, a partir de ahí le pareció interesante compartir en redes sociales su experiencia con los tratamientos y productos sin saber que poco a poco las marcas empezarían a interesarse por su opinión.
Aunque su propósito no es vivir de la blogueada, nos cuenta que su crecimiento ha sido un camino de altibajos, de aprender a confiar en su proyecto, mantener los pies sobre la tierra y principalmente mantener la esencia de su objetivo que es ayudar a las personas. – Lo que me motiva a seguir es recordarme constantemente mi objetivo principal – remarca Erick.
Desde los 20 Erick le ha dedicado una fracción de su tiempo a su proyecto, entre la universidad y su vida personal, sigue super motivado generando ideas constantemente y aprendiendo de todo un poco para continuar y mejorar con el tiempo.
Fernanda Rivera
“Para que pegue, te tiene que gustar a ti primero”
Theodora es el proyecto de Fernanda, mezclando su pasión y sus ganas de invertir inteligentemente su dinero decidió emprender este negocio de Nail Art que le permite dedicarse a lo que le gusta y generar suficientes ingresos.
Con 24 años ha trabajado durísimo contra su último año de Medicina para poder sacar adelante Theodora, pues se ha topado con muchas cuestiones sobre su proyecto. Sin embargo, con esfuerzo se ha mantenido firme en su rumbo, pues no se deja llevar por las críticas.
Con el tiempo ha aprendido a ser toda una líder, a ver por el bien común, tanto de ella como de sus trabajadores – Es muy cañón pensar que alguien depende de mí, alguien va a comer gracias al trabajo que le estoy dando – nos dice Fer, que con el tiempo se dio cuenta que el mejor consejo es saber gestionar problemas y hacer las cosas con mucho amor.
Esto es Sonic Youth
Quienes se atreven a ir más allá de lo “normal” para perseguir sus sueños y hacer lo que más anhelan, quienes aceptan el reto y deciden salir de su zona de confort.
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