Estaba scrolleando mi inicio de Instagram la otra noche ¡Vaya que hay cosas que ver! entre lo destacado encontré un aumento increíble de lives, recetas, tutoriales pero hay algo en lo más típico de instagram que fue lo que me llamo la atención: la selfies.
Estamos en una época muy rara, aislados, desconectados de muchas cosas y conectados al mismo tiempo. Las redes sociales toman un punto estratégico en el mantenimiento de las conexiones y la expresión creativa desde hace ya mucho tiempo e Instagram es el cultivo de contenido relacionado al culto a uno mismo.
El aislamiento nos obliga a explorar y pasar tiempo a solas, nos convertimos en nuestro entretenimiento y distractor principal, y empezamos reflexionar sobre nuestra identidad y perspectiva exterior e interior propia.
Exploramos nuestros diferentes talentos: en la cocina, en el makeup art, rediseño de prendas, ilustración y así un sin fin de cosas nuevas que aprender, cosas que no sabíamos incluso de nosotros mismos. Y todo esto se ve reflejado en nuestras cuentas de Instagram.
@sabinadelacruz|@fcoescv |@na.gamboa
Las mentes inquietas piensan mucho, y los creativos necesitan sacar sus ideas y expresarse. Estamos reflejando todo nuestro pensar y sentir el sentimiento de soledad, ansiedad, deseo, melancolía y enfrentarnos a estar de frente a una realidad abrumadora tanto afuera como a dentro de nosotros.
@alexisdeaeme
@liziebd
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